lunes, 17 de noviembre de 2014

La ruta mexicana de Menendez

En la desesperación por llegar, el concejal de la agrupación Grande Merlo Gustavo Menendez, está empecinado en recibir apoyos y sumar militantes sin fijarse mucho de donde vienen, que tienen para ofrecer o cual es su currículum (a mas de uno en realidad lo que le pesa es el prontuario), y en esa montaña rusa en la que esta subido… corre riesgos que le pueden traer serias consecuencias.

La marginalidad de varios de los miembros de su agrupación, donde el tema drogas es algo de todos los días, tiene su parte mas profesional en contactos amasados hace tiempo y bien lejos. Gustavo Menendez vivió en Mexico, más precisamente fue la noche mexicana la que lo cautivó y le dio de comer durante su estadía en el país azteca. Hoy nuevamente se muestra junto a su vieja amiga Carla Herrera Belkis, una hija de militantes, candidata a Diputada Nacional en la última elección de Carlos Menem, aunque después pasó al equipo de Kohan. Su pareja, también activo militante, fue Consejero del Partido Acción Nacional para el Presidente Fox. Aunque, esta es la parte más “publicable” del currículum. A Belkis se la señaló en numerosas oportunidades como mediadora entre los cárteles del Golfo y de Sinaloa, principales organizaciones armadas de este país dedicadas al narcotráfico, y los grupos organizados que en nuestro país llevan adelante tareas similares.
Hoy estas amistades cultivadas cuando trabajaba en la noche mexicana, son quienes buscan financiar su aventura política. Entonces, cuando por ejemplo se ve que su secretario Fernando Rossi es un confeso adicto y dealer en el populoso barrio del Parque San Martín, y Menendez lo sigue manteniendo en su cargo uno entiende que nada esta suelto, y que el riesgo de que células de los carteles de narcotraficantes mas peligrosos del mundo se instalen en Merlo no sería con Menendez un cuento de ciencia ficción