El comienzo de la verdad

Horacio “Lula” Cepeda fue finalmente suspendido en sus funciones públicas, como resultado del trabajo de la Comisión Investigadora, designada a mediados de este año.

En el marco de una investigación que descubrió los entramados políticos que apañaban aprietes, coimas, sobornos y piquetes, la verdad salió a la luz, y fue conocida y observada por los miembros de todos los cuerpos del Honorable Concejo Deliberante. A través de esta investigación, se confirmó la responsabilidad en los hechos imputados a Cepeda quien, inmutable, permaneció con su rictus de seriedad, cada día menos convincente.

La Comisión Investigadora, compuesta por representantes de todos los bloques, aprobó los informes que revelaban una conducta antiética y corrupta, en actos delictivos cometidos por Cepeda, los cuales justificaban y daban pruebas contundentes de los cargos que a este se imputaban, entre los que se resalta la organización y promoción de piquetes y quema de gomas en abril del corriente año en carácter de instigador, al tiempo que la Municipalidad de Merlo asistía a los damnificados por el temporal.

Así, queda suspendido de su cargo Horacio “Lula” Cepeda, como resultado de la votación propuesta por la Comisión Investigadora y respaldada por la mayoría del cuerpo Deliberante, en el día 22 de noviembre de 2012. Con esta acción se condena la conducta impropia y los diversos delitos que implicaron una trasgresión a las leyes y un desconocimiento total del comportamiento moral y debido a un funcionario.

El paro al país

La protesta del pasado 20 de noviembre encontró a los argentinos perplejos e indignados ante la furia desmedida y el exceso.

Lo más visto en las calles fueron cortes en los accesos y vías de ferrocarriles, agresión a trabajadores del transporte, asalto a edificios históricos de la ciudad de Buenos Aires y mucho más. En medio de las ansias por la adquisición de los derechos democráticos se usurpó el derecho ajeno y se bastardeó la decisión de miles de argentinos de “no parar”.

Al grito de “o parás o te rompemos todo”, los manifestantes invitaron al corte general enarbolando como bandera de justicia y equidad palos y piedras. De esta manera, las pérdidas ocasionadas por la manifestación superaron lo imaginado. Desde las víctimas de los destrozos, hasta quienes pararon por temor a sufrir represalias mayores, se vivió la represión más grande vivida en nombre de la libertad de expresión.

Trabajadores como los choferes de la línea 126 sufrieron golpes y rotura de vidrios en los coches, así como amenazas directas.

El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, calificó esta protesta de “piquetazo”, ya que “se cortaron accesos y vías de ferrocarriles”, para que la gente no pueda ir a trabajar.  "Lamentablemente no hay ningún paro. Un paro es cuando los obreros y los empleados deciden no acudir a sus lugares de trabajo. Esto es un piquetazo, en el que los que logran ir a trabajar son apedreados, como estamos viendo en el centro porteño”, dijo Abal Medina.

Por otra parte, Aerolíneas Argentinas alegó una pérdida millonaria por el paro opositor, a pesar de la actual regularizaron en sus operaciones aéreas. Más de ochenta vuelos de cabotaje, regionales e internacionales debieron ser suspendidos; lo que generó una pérdida millonaria para la empresa.

A la medida de fuerza adhirieron los gremios aeronáuticos Asociación Personal Técnico Aeronáutico (APTA), Unión del Personal Superior Aeronáutico (UPSA) y Asociación Pilotos de Líneas Aéreas (APLA). Ello provocó "una pérdida de más de seis millones de dólares en concepto de pasajes no vendidos, tickets devueltos y compensaciones en hoteles y comidas a los pasajeros que quedaron varados por no poder abordar sus vuelos en conexión", comunicó la empresa.

Así, puede verse reflejado el verdadero saldo de la medida adoptada por las centrales gremiales y contraponerse a los “logros” obtenidos. Y atención, que el paro que complicó a un país, en pos de intereses individuales, amenaza con repetirse y arremeter de vuelta contra el derecho de los demás. Un paro que ya no es al gobierno, sino al país entero.

La cátedra del Reo

Decálogo de cómo delinquir correctamente

Uno de los responsables del vergonzoso acto efectuado por la barra de Independiente había dado clases de cómo suspender un partido utilizando la violencia y la agresión más primitiva. Los agresores arrojaron bombas de estruendo, una de las cuales afectó al arquero de Belgrano Juan Carlos Olave, por lo que el árbitro Laverni debió suspender el partido que se jugaba en Avellaneda.

La preocupante explicación fue emitida en un canal de España, donde el barra de Independiente detalló con puntos y comas cómo suspender un partido, en el que además sacó un arma y efectuó un disparo al aire a modo de demostración, para sorpresa del periodista.

Finalmente, Richard Pavone, sindicado como barrabrava de San Telmo e Independiente, fue detenido en la localidad bonaerense de Dock Sud, partido de Avellaneda, en el marco de la investigación por los incidentes en el estadio del "Rojo" en el cotejo ante Belgrano de Córdoba. Meses atrás, nadie se había horrorizado ante la brutal cátedra impartida por el reo ante las cámaras españolas.

Según textuales palabras de Pavone, “un barra brava te puede arruinar un espectáculo. Un guacho tira una bomba de estruendo en el medio de la cancha, te suspenden la cancha y el dirigente va a pérdida". Así declaró abiertamente ante las cámaras.

Pavone fue apresado en la calle y en su poder se secuestró un revólver y una tiza de cocaína. Hasta el momento era buscado por el juez Correccional de Lomas de Zamora Rubén Oscar Baca, ya que en los videos de las cámaras de seguridad del estadio se lo vio supuestamente incentivando a los jóvenes que arrojaron las bombas de estruendo.

Además de quedar afectado a esta causa, el sospechoso quedó imputado de tenencia ilegal de arma de fuego.

Este atentado que pudo haber costado incluso hasta la vida de una persona, nunca fue previsto, aun cuando su autor intelectual dio bastas pruebas y detalles de que contaba con los medios y la intención de hacerlo.

La justicia (propiedad de socialismo)

Luego de verse implicado en la causa por presuntos vínculos con el narcotráfico, el ex jefe de la Policía de la Provincia de Santa Fe, Hugo Tognoli, habló sobre su detención y la investigación que se le sigue. Burlando la ley, y al tiempo que goza de plena libertad luego de sus presuntos ilícitos, el comisario aseguró que tuvo miedo de ser un preso político. Definió la causa en su contra como un “maltrato social en vida” y negó tener alguna vinculación con el narcotráfico.

Tognoli, aliado y militante del socialismo santafesino, a quien también se lo vinculó con el supuesto narcotraficante Ascaini, gozó abiertamente de la impunidad otorgada por las altas esferas de la corrupción en esta provincia. Este movimiento, al parecer menos preciado en su manejo del engranaje judicial en esta provincia logró tocar los puntos necesarios para a liberación del principal inculpado en la causa de narcotráfico.
En sus declaraciones, además, el implicado desmintió haber estado prófugo de la Justicia. “El abogado intentó comunicarse con el juez de la causa y al número que le dieron de la casa del juez para informarle mi situación. De qué fuga estamos hablando si yo me hice presente (en Tribunales)”, dijo el ex jefe de la policía. 
El comisario afirmó creer que al estar “tan mediatizada la cuestión, era un preso político, el jamón del medio de la lucha entre la provincia y la Nación". Asimismo, la evidente ventaja judicial obtenida por el poder socialista en esta provincia, demostró que lejos estuvo de tal situación. Tognoli acabó siendo trasladado y liberado por el juez Carlos Vera Barros. Otra muestra de que la justicia no siempre es independiente del poder; y de que el poder, a veces, está en las manos más inescrupulosas.

Tognoli Libre - 1. La Justicia – 0.